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Practicas de meditación

¿Sabías que puedes entrenar tu mente para ver la realidad como sea que tú elijas? La meditación es un entrenamiento mental que poco tiene que ver con poner nuestra mente en blanco. Hay todo un universo dentro de esta disciplina y tiene como objetivo transformar nuestra mente. Muchas veces no podemos cambiar el mundo externo pero sí el cómo nos relacionamos con él.

Mindfulness:

¿Te has preguntado cómo sería sentir todo el potencial de tu cuerpo? Cada uno de tus sentidos despierto, tu mente serena, tu energía fluyendo y en calma. Hay una energía que tenemos todos los seres, ese magnetismo que mantiene a todos nuestros átomos unidos, podemos experimentarlo.

¿Te cuanto un secreto a voces? Estar viva es la máxima experiencia espiritual, practiquemos para poder reconocerlo.

Purificación del cuerpo:

Eres tus pies tanto como tu rostro, los vellidos de tu nariz tanto como tus manos. Eres la creación más perfecta y posees el poder de sanarte a ti misma. Recuerda realizar este proceso con toda tu atención y compasión, visualiza cada parte de ti con tantos detalles que sientas que puedes tocarte. Aprendamos a reconocer la enfermedad y dolor como amigas, que con cariño, vienen a recordarnos las cosas que estamos ignorando. Escucha desde cada célula, despierta tu cuerpo y sana, entendiendo que cada cosa que sucede dentro esta buscando que puedas trascenderte.

Corazón bondadoso:

Entrenemos nuestra mente para despertar la emociones que queremos reconocer. Visualiza a alguien que ames, como su felicidad es tu felicidad y su tristeza te duele. Como, al igual que tú, desea amar y ser amada/o, como cuándo se ha equivocado ha sido desde la ignorancia de saber que se puede hacer de mejor manera. Visualiza a es persona plena y deja que el amor bondadoso inunde tu corazón, mente, se expiarse, te inunda, tanto que se desborda, pinta el filtro de tus ojos para que reconozcas la belleza, en tus oídos para que escuches la verdad, en tu boca para que hables con claridad, en tu piel para que sientas almas, llega a cada parte y se transforma en sabiduría.


Respiración consciente:

Inhala profunda, exhala lento. Estás aquí y ahora, eso basta. Siente cada pequeño detalle de tu respiración, el movimiento de tu cuerpo empezando por los más evidentes y luego llegando a esos pequeños cambios que son un poco más difíciles de reconocer. ¿Cómo te sientes al inhalar? Qué sensaciones se activan en tu cuerpo… Experiméntalas plenamente, haz lo mismo con tu exhalación. Regálate tu presencia, abrázate con tu atención y no te sueltes. Eres todo lo que necesitas.

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